HOTEL DOUBLE TREE BY HILTON BARCELONA GOLF

La conceptualización del conjunto llevada a cabo por Alfaro-Manrique Atelier procura reflejar el entorno natural existente, acercándose a su paleta de colores y sensaciones, y también procurando hacer una referencia sutil a ese entorno del golf en que predominan los tonos neutros y los verdes, con elementos que hacen referencia a cierto carácter natural mediante el uso de la madera o la cuerda en las luminarias, aportando la calidad y vuelta a lo natural que se buscaba.

La intervención realizada por  Alfaro Manrique Atelier,  en el Hotel Double Tree by Hilton Barcelona Golf de reposicionamiento para transformar un hotel existente con una privilegiada localización en el campo de Golf de Barcelona pero carente de una identidad, en un hotel con identidad, un lugar especial y que cumpliera los estándares de una gran marca internacional como es Hilton, más concretamente en su línea de resorts Double Tree y operado por Hotel Collection Internacional. El resultado es un hotel con personalidad propia donde se evidencia que ante todo se buscaba crear una narrativa y un carácter único, poniendo en valor su emplazamiento, creando un nuevo concepto volcado en él, al mismo tiempo acogedor y contemporáneo y con los requisitos de impacto, renovación, calidad y serenidad que un resort de esta línea debía tener.
La conceptualización del conjunto llevada a cabo por Alfaro-Manrique Atelier procura reflejar el entorno natural existente, acercándose a su paleta de colores y sensaciones, y también procurando hacer una referencia sutil a ese entorno del golf en que predominan los tonos neutros y los verdes, con elementos que hacen referencia a cierto carácter natural mediante el uso de la madera o la cuerda en las luminarias, aportando la calidad y vuelta a lo natural que se buscaba.

Todo esto va acompañado de una búsqueda de cierta sofisticación dado el target del cliente arquetipo que un resort de Double Tree con una fuerte palanca como el golf implica, y que se consigue con la geometrización de las piezas, diseños personalizados en las mismas tanto en muchas de las luminarias, como los elementos centrales y principales del lobby, que son a la vez, sofás o butacas y elementos escultóricos, formalmente muy potentes, que producen a la vez sorpresa y curiosidad en los clientes, pero manteniendo el diálogo con el carácter natural del proyecto. Las gamas entre los azules del cielo presente en los grandes ventanales como los verdes de los campos de alrededor, usadas en cálidos tejidos y los grises en toda su gama de las montañas de Monserrat, presentes también en las geometrías de la recepción, con los que se han trabajado los paramentos interiores, unidos a las maderas naturalescerrajería negra son rasgos distintivos de la intervención. La fotografía está muy presente en todo el proyecto de interiorismo, puesto que esta se ha trabajado no solo como elemento artístico sino como parte fundamental del concepto de proyecto, siendo todas imágenes del entorno captando la potencia de la zona marcada por las montañas de Monserrat, los viñedos de la región vinícola del Penedés, el campo de Golf, en blanco y negro y con formas y formatos que configuran cabeceros, potentes elementos formales en pasillos o en las grandes dobles alturas del lobby. Con la intervención se ha buscado crear en el gran lobby un lugar de encuentro, híbrido y flexible, con zonas diferenciadas por el trabajo de interiorismo realizado en ellas, y que den cabida a los nuevos usos que el viajero actual demanda; rincones más domésticos, zonas de descanso o espacios de coworking o reunión informal, así como otros más de relax y ocio como las zonas de chill out vinculadas al bar o de trabajo con formatos más flexibles.


En definitiva, generar un lugar con carácter propio, en un edificio existente, con un enclave natural especial puesto en valor, con los requerimientos de un operador internacional como es Hilton y el diseño diferenciado de Alfaro-Manrique Atelier. La mayoría de las piezas de mobiliario se han diseñado específicamente para el hotel, con esa voluntad de otorgarle del lujo que es hoy en día la singularidad, el tener piezas fuera de catálogo, expresamente diseñadas para un concepto o emplazamiento. Así desde las butacas “Silfo” diseñadas para el lobby de color azul intenso y con una escala y formas rotundas, a medio camino entre el mueble y la escultura; al sistema de mesas Top de pies formados por grandes cilindros de chapa y sobres de roble natural y cantos biselados, que con diferentes combinaciones y alturas, conforman las mesas bajas del lobby, la mesa de coworking, las mesas de reunión informal; a las mesas comunes y altas del bar o las grandes mesas de banquete de las rinconeras del restaurante, pasando por los detalles del cabecero o el tocador de la suite, hasta la recepción con las montañas de Monserrat al fondo.

Los elementos textiles de alfombras, tanto la de la suite como las zonas comunes y que continúan con el mismo lenguaje formal y geométrico del resto de la intervención han sido también diseñadas por los interioristas, usando lanas naturales y colores en grises, tierras, verde bosque y azul intenso.

Respecto a la Iluminación nuevamente se ha combinado los diseños propios de Alfaro- Manrique Atelier, como las pirámides de madera negra del lobby o los sistemas de iluminación de pared, todos con globos opales blancos y cerrajería negra, con las lámparas de fibras trenzadas. 

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