Capitaneado por el arquitecto y diseñador José Soria, el estudio DEART Hotel Design ha desarrollado el proyecto de interiorismo de este gran complejo hotelero situado en un enclave paradisíaco en la Isla de Sal en Cabo Verde, en África. Rindiendo homenaje a la cultura y naturaleza caboverdianas, las fachadas principales de los edificios que conforman este gran complejo han sido revestidas con piedra caliza.
Un amplio y luminoso Lobby recibe a los visitantes. Un espacio sobrio, sin ornamentación, elegante y atemporal de líneas rectas. Una variedad de lucernarios y grandes ventanales permiten la entrada de abundante luz. Además de cumplir su principal función, los lucernarios suponen elementos destacados diseñados para no pasar desapercibidos. Ello se ha conseguido siendo resaltados con un revestimiento a base de perfiles metálicos en negro en todo su perímetro. En su interior se alberga un conjunto de grandes lámparas suspendidas en tonos dorados y cristal fumé que expanden la sensación de amplitud del espacio. Grandes plantas son instaladas en innumerables puntos de la zona, hecho que facilita junto a la gran cantidad de luz natural la recreación de un espacio natural exterior.
Debido a sus grandes dimensiones y posicionamiento, el lucernario situado en el centro del lobby se convierte en el nexo que conecta los diferentes espacios que alberga el lobby, siendo un elemento característico, visible y notorio de la zona que recibe y despide al cliente. El mobiliario del lobby está compuesto de butacas individuales y sofás con pequeñas mesas de acompañamiento y está concebido como un lugar de paso, en el que predomina una iluminación y gamas cromáticas frías de grises.
La zona central destaca por su pavimento cerámico decorado con acabados marmoleados en tonos blanco y negros que presentan un patrón geométrico el cual también se aplica en elementos de mobiliario destacados como son los mostradores de recepción y las barras situadas en el lobby, logrando así una continuidad estética en el espacio. Se combinan materiales cerámicos con acabados brillo y mate, maderas y metales. Predominan los colores negros, blancos y gama de grises, tanto claros como oscuros que crean contraste entre ellos.
El Bar Lobby está integrado en el amplio lobby del hotel junto al resto de zonas diferenciadas en este espacio, como son la recepción con amplios mostradores y las zonas de descanso y espera con mobiliario.
El estilo contemporáneo con el que han sido diseñadas todas sus zonas, ofrece un resultado acogedor, elegante y sobrio. El mobiliario del bar incluye un mobiliario mucho más decorativo además de funcional, conformando conjuntos de mesas en los que poder disfrutar de momentos más largos y relajantes. Estos se ven enfatizados gracias a una iluminación mucho más cálida e intimista y la instalación de cortinajes con los que modular la entrada de luz natural cuando se desee.
Un piano de cola situado en un lugar destacado y visible del bar supone el elemento característico de la zona, pensada para poder deleitar un cóctel acompañado por una elegante y suave banda sonora. El Lobby Bar cuenta además con una bella terraza exterior desde la cual se puede apreciar la belleza del complejo y en la que la cuidada iluminación se vuelve protagonista cuando cae el sol.
Existe además otra terraza, llamada Terraza Chiringuito, en la que también se puede comer y disfrutar de relajantes momentos directamente conectada con una de las piscinas ofreciendo así una gran sensación de relax.
Las habitaciones generan un ambiente cálido, moderno y acogedor, gracias a la armonía obtenida por la gama cromática y la elección de materiales. Los patrones étnicos presentes en los elementos decorativos inspiran el diseño de estas estancias, conectando con la naturaleza. La decoración de inspiración étnica en tonos blancos y negros, culmina en un espacio elegante y sobrio. Para el diseño de mobiliario, se han empleado maderas oscuras que toman gran presencia en el espacio y que junto con los tonos tierra de los suelos, aportan calidez al conjunto. Los colores utilizados son cálidos propios de la tierra, combinados con textiles oscuros que incluyen estampados geométricos propios del estilo étnico. Las formas geométricas se ven también aplicadas en las paredes acristaladas que separan la zona de ducha y baño del área principal, plasmando así la naturaleza a través de los textiles y mobiliario.
El hotel cuenta con numerosos restaurantes, entre los cuales podemos destacar el Restaurante principal, con zona de buffet y terrazas. Un espacio cálido, funcional, relajado y natural obtenido gracias a la combinación de materiales en tonos cálidos. El uso de cuerdas, mimbres y barros, ponen de manifiesto el espacio natural en el que se encuentra ubicado el hotel. La utilización de los verdes como único aporte de color, dan protagonismo a la naturaleza y vegetación del entorno. El diseño de la iluminación se ha tenido en cuenta como un elemento constructivo y decorativo más. De este modo, la luz se convierte en el hilo conductor que va uniendo los diferentes espacios. A través de grandes ventanales que hacen que la vegetación y la luz exterior se una con el interior se va formando una unidad.
Las zonas de wellness y spa han sido diseñadas aplicando la misma armonía que caracteriza el resto de espacios, generando una vez más un espacio acogedor y cálido, al igual que las numerosas terrazas exteriores con las que cuenta este hotel, las cuales han sido tratadas e integradas en el entorno. Una gran piscina infinita ha sido diseñada con un inmenso ventanal que nos ofrece la sublime belleza del paisaje local de la Isla de Sal, conectando de este modo el interior y el exterior de una manera orgánica. La iluminación está pensada para ser modulada en función del momento del día y así lograr esta conexión con el exterior. Los elementos decorativos, tales como lámparas, así como patrones aplicados en las paredes y techos, son de inspiración étnica siguiendo la línea general de diseño del hotel que define su esencia y personalidad.
