LA MÁQUINA CALEIDO

Como un viaje en el tiempo por raíles, así planteó Studio Gronda la renovación del clásico restaurante La Máquina. Pasajeros, bienvenidos al tren de la gastronomía.

En el corazón del nuevo centro comercial Caleido, en la zona de las cuatro torres de Madrid, emerge La Máquina, una embajada gastronómica que rinde homenaje a cuatro décadas de historia.

Un proyecto llevado a cabo por Studio Gronda, que ha transformado casi 600 metros cuadrados en tres plantas independientes, en un viaje a través del tiempo y el espacio.

Desde el instante en que se cruza el umbral, La Máquina de Caleido te invita a embarcarte en un recorrido único. Studio Gronda, visionarios del diseño arquitectónico e interiorismo, han tejido una narrativa que fusiona el pasado y el futuro de La Máquina de manera sutil y abstracta, sin caer en la nostalgia o en clichés temáticos.

El diseño, cuidadosamente elaborado, celebra los 40 años de La Máquina, incorporando elementos icónicos de su historia de manera abstracta. La excelencia de las materias primas, las elaboraciones tradicionales y el servicio cálido son los pilares que han trascendido a lo largo de las décadas, y en esta nueva creación, se mantienen como la esencia misma.

Visión cenital de la zona de barra

Como una antigua estación ferroviaria

El estudio, al idear este proyecto, buscó no solo crear un restaurante, sino forjar un puente generacional entre la clientela histórica de La Máquina y las nuevas generaciones presentes en el complejo. El resultado es una experiencia que armoniza el presente y el pasado, sin perder de vista la calidad del producto y la cocina cuidada que definen a esta afamada casa.

Lámparas que remiten al vapor de los trenes antiguos

Inspirándose en la temática ferrocarril, el diseño evoca los distintos recintos presentes en una estación ferroviaria. La antesala, con su gran mesa comunal, crea un ambiente informal y acogedor, preparando al comensal para un viaje gastronómico único.

Las celosías de bronce, con su estética “Art Deco” del siglo XX, añaden un toque de elegancia a las distintas salas. El bar, con su triple altura, se presenta como una máquina locomotora abstracta, con una barra de coctelería/gastronomía que emana vapores de calderas imaginarias. Este mágico rastro de vapor conduce a la segunda sala gastronómica, una sorprendente terraza panorámica en la planta alta: el Rooftop.

Una de las salas con espejos envejecidos

La majestuosidad de las salas de espera

La Gran Sala, en la planta principal, evoca la majestuosidad de las salas de espera de estaciones ferroviarias, con arcos imponentes, estucos italianos y espejos añejados. Una sala abierta a los jardines circundantes, iluminada por luminarias colgantes diseñadas exclusivamente para este espacio, transporta a los comensales a otra época.

Lámparas estilo Art Deco diseñadas para el restaurante

Después de explorar el Rooftop, el viaje culmina en la planta inferior, donde una pequeña barra gastronómica y salón se abren hacia una terraza en el paseo comercial de Caleido. Este espacio, más desenfadado y joven, busca ofrecer una experiencia informal y fresca, completando así el abanico de opciones gastronómicas de La Máquina.

En cada rincón de La Máquina de Caleido, Studio Gronda ha logrado tejer una experiencia única que trasciende el mero acto de comer. Este no es solo un restaurante; es un viaje a través del tiempo, donde el pasado y el futuro convergen en una sinfonía gastronómica que celebra la esencia de La Máquina y anticipa un emocionante capítulo en su historia, siempre con el mundo del ferrocarril como punto de partida y también de llegada. En palabras del estudio, “este diseño holístico ha logrado unir arquitectura, paisajismo, interiorismo, diseño industrial, vajilla y gastronomía en una experiencia personalizada y única. ¡Bienvenidos a bordo de La Máquina de Caleido, donde cada comida es una travesía en el tiempo!”.

También te puede interesar

Menú

Acceder